BCN

Plaza Catalunya. La rambla. Un río de policías y turistas.

Escaparse entre callecitas tortuosas del gótico, del Raval, la que sean.
la brisa mediterránea es un lujo de luces y sabanas volantes, rojas, blancas, amarillas. caminar los ojos hacia arriba...es otra carretera...me encanta...
me encanta el olor de Barcelona. Caminar persiguiendo c/olores, buscando sombra y perderse. perderse en las mismas calles porque siempre me atrae este azulejo, esta sombrilla o este chorro de agua

leer en un patio, tirarme a medias, en el limite de lo correcto, en el espacio entre la suspicacia policiaca y la errancia turística. no llamar demasiado la atención... una cosa que aprendí muy bien en Francia...

 Es que están por todos lados. Están. en todas las calles, en todos los parques, patrullas y motos, furgonetas y luces tiburonescas. armados. con esas armas democráticas que no matan. esta violencia suave de la disuasión.... el terrorismo de nuestras democracias... no tienen porque pegarte pues llenan todo el espacio... lo llenan tanto que cansa la mirada...
la guitarra... es tan sospechosa... la odian: en los aeropuertos, en los autobuses, en las calles, en los parques...

Chuuuuut!!!

la música llena el espacio con su resonancia galáctica !claro¡ Pues se trata de colonización. otra vez.  esos viejos imperios frustrados, devorados por la crisis de su propio sistema economico mortuorio, ya no tienen tierras por conquistar. asi que lo hacen en su propia casa, con su propia gente. nos roban el aire. nos roban nuestros cuerpos. Nos roban.

que estrategia mas eficaz... con su presencia omnipotente, tomas el camino de vuelta a casa.
Y no pasa nada.